Nacido sin tobillos ni peroné debido a una malformación que demandó la amputación de sus dos piernas cuando tenía siete meses, se transformó en un deportista de primer nivel impulsado por sus prótesis de carbono con las que ganó la medalla de oro en los Paralímpicos de Atenas 2004 e incluso alcanzó las semifinales de los 400 metros en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Tras vencer a velocistas profesionales convencionales, ahora también venció a un pura sangre porque el corredor sudafricano Oscar Pistourius derrotó a un caballo de carrera en una prueba disputada en Qatar como parte de una campaña a favor de la inserción social de las personas con alguna limitación física.
En el barrio Aspire de la ciudad de Doha sobre un tramo especialmente acondicionado para este desafío, Oscar Pistorius reveló que a su preparación previa le incrementó la cantidad de estiramientos y aumento la ingesta de proteínas en los días previos a esta singular competencia contra un equino árabe tal como en su momento lo hizo tanto el múltiple campeón olímpico estadounidense Jesse Owens como el velocista galés Jamie Baulch. “El objetivo no era ganar sino demostrar que los discapacitados no deben ser esteriotipados”, afirmó Pistorius, dueño de media docena de medallas doradas paralímpicas.
La carrera estuvo organizada por World Horse Welfare, organización benéfica que cuida caballos abandonados cuyos especialistas al mando de Tony Tyler tomaron todos los recaudos necesarios para que el equino no sufra maltrato alguno.
FUENTE: http://www.eldepornauta.com.ar
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